Revista Azimuth, Colegio de Ingenieros Topógrafos de Costa Rica -33-
La falta de un modelo geoidal propio para Costa
Rica, obliga a utilizar el modelo Carib97 y el EGM96,
que mantiene problemas de pendientes del terreno
muy marcadas que producen variaciones en la
determinación de la ondulación geoidal.
Dicha situación, ha dado lugar a la investigación de
un proyecto piloto para demostrar la necesidad de
contar con un modelo geoidal que defina información
de mejor calidad en los campos geofísicos de interés
para todos los profesionales afines a la ciencia.
Esa realidad, fue corroborada por la Ing. Gabriela
Cordero Gamboa y el Ing. Mauricio Varela Sánchez
de la Escuela de Topografía, Catastro y Geodesia de
la Universidad Nacional, quienes enfatizaron en
que existen datos medidos en 1963 por el Instituto
Geográfico Nacional (IGN) a partir de mediciones
en varias líneas de nivelación, que en su momento
permitieron determinar coordenadas altimétricas
para puntos que se establecieron como bancos de
nivel. “Después de esa fecha, hasta el día de hoy, no
se ha realizado ningún mantenimiento o control a la
información”, señaló Cordero.
La inacción a nivel de país en este campo y la
necesidad de un geoide a nivel de región ha
propiciado que el Colegio de Ingenieros Topógrafos
(CIT) tome la batuta en cuanto a la iniciativa y busque
los medios para llevarla adelante.
Según el Ing. Freddy Gutiérrez, todas las redes
geodésicas estánamarradas aunsistema internacional.
“Se quiere generar un geoide local para evitar esa
dependencia, sin embargo conformarlo de manera
doméstica tiene un valor muy elevado”. Según el
experto hay una necesidad a nivel del Istmo para
contar con ese marco espacial, que contribuiría a que
todos los países estén bajo un esquema homogéneo.
Proyecto Geoide para Centroamérica
aún no ve la luz
Costa Rica urge de un marco de referencia para establecer sus coordenadas.
• Falta de medición de coordenadas
exactas es una alerta para el Istmo
•País “amarrado”
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